Con nueve años de trabajo y éxitos: Programa Fray Juan Ramos de Lora presenta informe general de avances

El Programa Fray Juan Ramos de Lora presentará, a la Secretaría de la Universidad de Los Andes, un trabajo que busca dar a conocer, de manera general, todos los avances que ha logrado el programa durante el tiempo que tiene implementándose. Los logros obtenidos -desde la Secretaría hasta la Comisión Ejecutora del programa- han permitido darles mayores oportunidades a los estudiantes de los planteles públicos que tienen carencias socioeconómicas, el cual es y seguirá siendo el requisito fundamental para poder incorporarse al programa.

“Este trabajo lo estamos realizando desde hace tiempo, el mismo tiene muchos números y datos estadísticos, por lo que nos tomó largo periodo para su culminación. Hoy estamos haciéndole los últimos retoques para entregárselo al Secretario de la ULA, para que se demuestre lo que cuantitativamente ha alcanzado y realizado este programa”, informó Domingo Baptista, coordinador del Programa Fray Juan Ramos de Lora.

Las cifras y los recursos que ha dispuesto la Comisión Ejecutora del programa, han sido bastante satisfactorios, por cuanto se han logrado incorporar a la universidad más de 1.000 alumnos en 9 años de trabajo, además de demostrar, con la conclusión de este trabajo, la permanencia de los estudiantes ingresados por el programa en la universidad.

Ya hay 14 graduados que corresponden a las dos primeras cohortes que dieron inicio al programa. “Hay todavía estudiantes de esas cohortes que están por graduarse este año. Desde luego, hay que tomar en consideración los desfases que ha tenido la universidad y eso ha retrasado la graduación de muchos de estos estudiantes. También queremos resaltar que hay estudiantes que, aún bajo esas condiciones económicas de donde provienen, han resultado ser sobresalientes y calificados por alto rendimiento, lo que ha ameritado la premiación que le ha otorgado la Dirección de Asuntos Estudiantiles”, dijo el profesor Baptista.

Este trabajo es una demostración de cómo ha avanzado este programa, el cual, con mucha equidad y justicia social, permite que la universidad también se convierta en un bastión de extensión social y de carácter democrático.

Para finalizar, dijo el profesor Baptista que “La autonomía es la que le ha permitido a la universidad hacer estas proyecciones, hacer este enlace con la sociedad civil, para que entienda la gente que no tiene recursos, que la universidad está de puertas abiertas para todos. Sin discriminación, que las exigencias que tiene la universidad, lo cual es lo lógico, las tienen todas las universidades del mundo, para que la calidad se preserve y demuestre el progreso que se exige en todas partes del mundo”. 

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