Desde el mes de noviembre del año 2009 la “Cátedra Cultural de Medicina Espiritual” forma parte del plan curricular del Postgrado en Medicina de Familia adscrito al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales de Naguanagua, Valencia.

Profesores y estudiantes de este postgrado aprenden a evaluar a sus pacientes como seres humanos integrales y asumir así la definición del término “salud” que, desde 1948, dio a conocer la Organización Mundial de la Salud: “un estado de completo bienestar físico, mental, espiritual, emocional y social, y no sólo la ausencia de enfermedad”.

Carolina Suárez, coordinadora docente de este postgrado, explica que en la cátedra los médicos de familia aprenden a tratar al paciente vinculando su entorno físico con su entorno emocional.

“Todos los días aprendemos de las personas que acuden a nuestra consulta porque éstas no sólo plantean sus problemas físicos. Debemos ver la Medicina como parte de un sacerdocio y mirar, atender, evaluar y escuchar al paciente, no sólo darle un récipe con indicaciones que a veces ni se entienden”.

El facilitador de la “Cátedra Cultural de Medicina Espiritual” es el doctor Guido Guedez, un médico de familia que se ha dedicado a estudiar la relación que existe entre la medicina y la espiritualidad.

“Los diez residentes del Postgrado en Medicina de Familia de Naguanagua se han mostrado abiertos a la formación espiritual y descubren que pueden sanar también los temores, rabias y angustias de sus pacientes. Se trata de  comprender que formamos parte de una cultura y que los médicos también tenemos los mismos problemas. En la relación médico-paciente lo fundamental es reconocer la existencia de Dios en el ser humano que acude a la consulta”.

Cada médico de familia de este ambulatorio de Naguanagua recibe 24 pacientes diarios y ambos entrevistados aseguran que los cambios son evidentes: los pacientes muestran su complacencia por las expresiones de amor que reciben de los médicos y la cantidad de personas que acude a la consulta ha aumentado.

“Expresar gratitud al paciente –explica Guedez- y hacia la esencia de Dios que mora en él nos hace crecer como médicos y nos enseña a rescatar el sentido profundo de la medicina”.

Las autoridades de la Universidad “Dr. Rafael Belloso Chacín” de Maracaibo, ya están en contacto con el doctor Guido Guedez para replicar el contenido y experiencias de esta cátedra en forma de diplomado, el cual tendría un año de duración y estaría dirigido a todos los médicos de familia de nuestro país.

En Naguanagua, a las horas de clase de esta cátedra, se han incorporado odontólogos, psicólogos, cirujanos y hasta los familiares de los residentes, todos deseosos de saber cuál es el secreto de los médicos de familia.
 
Las características de la “Cátedra Cultural de Medicina Espiritual” fueron presentadas en el 21 Simposio de Medicina de Familia realizado en Mérida como una experiencia exitosa.