ULA-Táchira y estudiantes del Colegio Nuestra Señora del Carmen unen esfuerzos en pro de la paz y la convivencia ciudadana

Las alumnas de bachillerato explicaron que llevarán adelante actividades lúdicas y creativas para promover la formación de valores en los niños (fotografía: Ana Solivey Zambrano Labrador) Las alumnas de bachillerato explicaron que llevarán adelante actividades lúdicas y creativas para promover la formación de valores en los niños (Fotografía: Ana Solivey Zambrano Labrador)

Un  grupo de estudiantes que cursan el quinto año de bachillerato en la Unidad Educativa Colegio Nuestra Señora del Carmen, de la ciudad de San Cristóbal, en el estado Táchira, llevan adelante un proyecto de labor social enfocado en la concienciación de la población sobre la necesidad de poner un alto a las situaciones de violencia, toda vez que en los últimos años se evidencian en diferentes escenarios un auge de manifestaciones de este tipo, ante lo cual, el proyecto nace como una iniciativa para el acompañamiento socio-emocional de la comunidad educativa (padres, alumnos y docentes), buscando sensibilizar, así como proponer acciones preventivas ante la problemática de violencia y acoso escolar.

El grupo está integrado por nueve alumnas del mencionado curso, valga decir: Maxuyn Ovallos, Heila Zambrano, Kristh Lara, María Gabriela Molina, María Gabriela Navas, Zenddy Ramírez, María Fernanda Márquez, Mileidy Rey y Maribi Fajardo. De manera concreta, María Fernanda Márquez, vocera del grupo destacó que la violencia ha llegado a las escuelas y liceos con manifestaciones cruentas e impactantes. Destacan que este tipo de acciones lamentables ocurren en la escuela y es multidisciplinar, en cuanto a los diversos factores que la ocasionan.

Destacaron las alumnas que en el proceso de análisis de la actual situación que se vive en algunos entornos, se evidencia que el accionar negativo por parte de los jóvenes es reflejado de diversas maneras como las agresiones físicas, uso de armas y objetos contundentes. Pero además de ello, también se genera agresión psíquica, reflejada en apodos o sobrenombres para con los compañeros de estudio, en  amenazas y  en la exclusión de grupo.

Profesor Omar Pérez Díaz, Coordinador Administrativo de la ULA-Táchira, felicitó la labor e iniciativa de las estudiantes con este proyecto (fotografía: Leandro García) Profesor Omar Pérez Díaz, Coordinador Administrativo de la ULA-Táchira, felicitó la labor e iniciativa de las estudiantes con este proyecto (fotografía: Leandro García)

En ese sentido, subrayan las estudiantes que con la inquietud de seguir el paradigma de todos aquellos que siempre han luchado por la libertad, la paz y la justicia en el mundo, a los constructores y líderes incansables de sueños, a quienes dedican su vida al servicio del amor, decidieron llevar adelante el proyecto, para lo cual buscaron el apoyo de una institución de trayectoria y que esté trabajando en dicha materia, como por ejemplo la Universidad de Los Andes Núcleo Universitario “Dr. Pedro Rincón Gutiérrez”-Táchira, casa de estudios que viene adelantando, con el Instituto de Estudios Humanitarios de las Naciones Unidas y  la labor realizada a través de la Cátedra de la Paz, el fomento de los valores morales y sociales para lograr un mejor convivencia y, por ende, elevar la calidad de vida de las comunidades.

En este sentido realizaron los contactos respectivos y recibieron la siempre oportuna respuesta del profesor Omar Pérez Díaz, coordinador administrativo de la ULA quien viene apoyando el desarrollo de tan importante proyecto social, mediante la planificación de una serie de actividades sociales y académicas, las cuales serán implementada en tres colegios de la ciudad de San Cristóbal, a saber: Colegio Unidad Educativa Colegio Nuestras Señora del Carmen, U.E. Monseñor Arias Blanco y Escuela Bolivariana Leonardo Ruiz Pineda, a fin de llevar ese mensaje de paz y de convivencia ciudadana a aproximadamente 2 mil estudiantes. Vale destacar que en esas jornadas utilizarán estrategias creativas, como materiales didácticos y actividades lúdicas para que el mensaje llegue de manera efectiva a todos los niños y adolescentes que participen del proyecto.

El grupo de alumnas que llevan adelante tan importante proyecto en pro de la paz comunitaria. Maxuyn Ovallos, Heila Zambrano, Kristh Lara, María Gabriela Molina, María Gabriela Navas, Zenddy Ramírez, María Fernanda Márquez, Mileidy Rey y Maribi Fajardo. (Fotografía: Ana Solivey Zambrano) El grupo de alumnas que lleva adelante tan importante proyecto en pro de la paz comunitaria. Maxuyn Ovallos, Heila Zambrano, Kristh Lara, María Gabriela Molina, María Gabriela Navas, Zenddy Ramírez, María Fernanda Márquez, Mileidy Rey y Maribi Fajardo. (Fotografía: Ana Solivey Zambrano)

Por su parte el profesor Omar Pérez Díaz, asesor del proyecto en la Universidad de Los Andes Núcleo Universitario “Dr. Pedro Rincón Gutiérrez”, felicitó a las jóvenes por tomar la iniciativa de llevar adelante este proyecto social, toda vez que  se trata de un tema de gran relevancia en los últimos tiempos y al cual hay que atender desde diferentes escenarios, pues se debe partir del principio de que  educar para la paz, no es tan solo una iniciativa de Estado en la lucha contra la violencia, si no una motivación que debe existir en toda institución educativa que aspire una convivencia pacífica.

Subraya el profesor universitario que “instruir para la paz, es la forma más acertada de educar en valores, puesto que la formación para la paz, lleva con ella valores imprescindibles como la justicia, la solidaridad, la tolerancia, la convivencia, el respeto, la cooperación, la autonomía, la racionalidad y efectivamente el amor por la verdad”.

Ahora bien, desde el punto de vista académico, este trabajo  desarrollado por las jóvenes estudiantes, es una motivación para que sean semilleros de investigación, con la visión puesta en la cristalización de proyectos de investigación de interés social y además como promotores (as) de la paz, para que promuevan y divulguen este mensaje en todos los rincones de las comunidades, con la participación de docentes, padres o representantes, autoridades y la comunidad en general, quienes complementan el entorno pedagógico y empiezan a tomar parte activa dentro de esta preocupación colectiva que atañe a todos por igual. (Prensa Vicerrectorado/Ana María Zambrano/CNP.11.277)