Delincuencia azota al Instituto de Investigaciones Agropecuarias

Un equipo de profesores del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (IIAP),  de la Facultad de Ciencias Forestales y Ambientales de la ULA, denunciaron una serie de robos al que han sido sometidos en este instituto durante el año 2016,  al tiempo que explicaron cómo se ven afectados en la docencia, en la investigación y en el trabajo de extensión mediante el cual ofrecen apoyo a los productores de la región andina.

La profesora Mayela Castillo, coordinadora de línea animal del IIAP, dijo que, en este contexto, la investigación y los estudiantes son también muy afectados ante esta ola delincuencial que ha invadido las instalaciones del IIAP durante los últimos meses. Agregó que los equipos que se han robado son muy costosos y es muy difícil reponerlos lo cual ha repercutido negativamente en el apoyo y asesoramiento que han venido ofreciendo a productores de la región andina. Lo más grave de esta situación, dijo la profesora Castillo, es que no hay una respuesta que indique que la seguridad  va mejorar.

Casilla de vigilancia sin conlcuir y por tanto no hay vigilancia que controle entrada ni salida de la gente.

Por su parte Ilka Domínguez, coordinadora del Laboratorio de Entomología, denunció que durante los años 2014 y 2015 se le hizo una remodelación importante al mencionado laboratorio por parte del Vicerrectorado Administrativo, pero lamentablemente las modernas instalaciones no se han podido aprovechar  porque hace unos meses le robaron el cable de la electricidad principal y sin electricidad no hay posibilidad de conectar los equipos, no tienen cómo conectar microscopios, computadoras, ni ningún aparato para trabajar y en la docencia llevan a los estudiantes y les dan clases de campo pero no tienen cómo enseñarles la práctica.

Por esta parte la cerca fue robada hace mas de un año, y los delincuentes se meten sin problema alguno

Igualmente la profesora Osmary Araque, coordinadora del Laboratorio de Ecofisiología y Cultivo, explicó que parte de su trabajo es atender a los productores a los cuales apoyan asesorándoles en cuanto a cómo es el comportamiento de las plantas de acuerdo con el sitio donde crecen y las condiciones climáticas y parte de ese trabajo es montar los ensayos en el área de invernaderos que está en el IIAP para variar algunas de esas condiciones climáticas en aspectos tales como nutrición, radiación y temperatura pero en los últimos meses no han podido hacerlo debido a que montan sus ensayos, y entonces los delincuentes se meten al IIAP y abren los invernaderos, rompen las mayas y sustraen el material o, si adelantan algún ensayo de producción, les roban los frutos y ya no pueden tomar datos y menos confiables.

 

 

 

Las mayas de los Invernaderos son rotas para metersen a robar los ensayos de cultivos de frutas y hortalizas

 

Por su parte Nestor Morales, técnico en la línea de Comunicación Agrícola, exhortó a la comunidad de Santa Rosa para realizar un trabajo en conjunto en materia de seguridad con el fin de que tanto institución como comunidad se beneficien. De igual manera destacó que la seguridad interna debe ser reforzada, ya que se necesitan un mínimo de 4 vigilantes para que cubran el área completa y cuentan con solo uno o a lo sumo dos. Agregó que tienen casi 20 años en la construcción de la Casilla de Vigilancia en la entrada y aún no se termina, lo cual lleva a que no haya vigilancia en la entrada.

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Estudiantes de TSU en Ingeniería Forestal manifestaron su preocupación por que no pueden recibir las prácticas en los laboratorios como debe ser y exhortan a las autoridades a brindarle apoyo al IIAP

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También la médico veterinario Anacelmira Urbina es una de las tantas afectadas, ya que no tiene vehículo y por esa zona no hay línea de transporte, y por lo tanto debe caminar desde la Facultad de Ingeniería hasta el IIAP en un trayecto de 1.5 kilómetros y al ingresar al instituto debe caminar igualmente más de 1 kilómetro para llegar a su oficina, pues el IIAP es una área bastante extensa, con potreros, laboratorios, aulas de clases, invernaderos y todo esta separado y  a veces hay solo un vigilante para toda el área. Por otra parte dijo que llega al Laboratorio de Enfermedades Bovinas donde está su oficina y se encuentra con que no tiene luz, no tienen teléfono porque los cables del teléfono también se los robaron y el internet tampoco funciona además de que muchas veces no hay cómo buscar a los estudiantes cuando tienen las prácticas, por lo que dice que está trabajando con las uñas.

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Hay áreas del Instituto de Investigaciones Agropecuarias sin electricidad, sin teléfono y sin internet 

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El director del IIAP, profesor José Suniaga, dijo que este año les han robado 2 bombas de agua, 1 bombona de gas de las grandes, 2 microscopios, 5 computadoras, 3 laptops con sus impresoras, 1 lupa estereoscópica, 1 modem y 1 router de internet de uno de los laboratorios. Pero además recientemente, en agosto, se robaron 3 baterías de los vehículos de prácticas, 5 cauchos nuevos de repuestos con sus rines, picos, palas, desmalezadoras, mangueras para el riego en invernaderos, han roto las mayas y los plásticos para llevarse las cosechas de los ensayos, en fin, dijo el profesor Suniaga que eso parece tierra de nadie porque nunca hay vigilancia, porque si asignan un solo vigilante nada podría hacer solo y menos el fin de semana, además de que si ve robando cómo se comunica con las autoridades si no tienen radio ni teléfono. Frente a esto, dijo el profesor Suniaga que es prioritario que terminen la casilla de vigilancia y que se ponga a funcionar de inmediato, pero que además envíen mínimo 4 vigilantes  y que se les dé un radio para comunicarse. María de los Ángeles Pérez. Prensa ULA. 9795 Foto Lánder Altuve