Rafael Cuevas: La solidaridad de la universidad y los merideños fue inquebrantable

 

Saludos amigos y compañeros de nuestra querida universidad:

 

Quiero por este mensaje agradecer las innumerables manifestaciones de afecto y respaldo recibidas por esta vía y por otras por muchos de los miembros de mi Universidad, incluido el  Rector, el Consejo Universitario, mi querida Decana de la Facultad de Humanidades y Educación, mis colegas profesores de mi amada Facultad, la junta directiva de la APULA y los demás gremios, así como mis queridos estudiantes, con motivo de mi arbitraria detención, ocurrida el pasado 26 de junio cuando me encontraba, en mi condición de ciudadano, ejerciendo mi legítimo derecho a la protesta. Vale decir que justo en el instante en que fui aprehendido cobardemente, gritaba que no nos quitarán el derecho a protestar y que hoy, estoy más seguro que nunca de que es así.

 

Fueron apenas 11 días, nada es cuando pienso en Vilcar, en Pancho, en tantos otros, pero fueron suficientes para sentir una poderosa solidaridad que, hablo con sinceridad, me compromete a seguir luchando en la calle por lo que creo y quiero, que es un país libre y próspero y una Universidad en consonancia con ese país que sueño.

 

La democracia, ya lo dijo alguien, es el único sistema gobierno que exige de todas las personas que sean mejores, así que esa es nuestra tarea. Por ello, ese es mi compromiso y mi solicitud para ustedes: seamos mejores, brillemos como luciérnagas desde nuestra pequeña capacidad de alumbrar, pero convencidos de que, ese pequeño brillo personal de cada uno, esa tímida luz que somos capaces de irradiar puede, no obstante, unida al brillo de los demás, convertirse en una poderosa luz capaz de alumbrar esta oscura noche de luna roja y mostrarnos un camino mejor. Desde mi corazón solo puedo decirles gracias, infinitas gracias.

 

 Rafael Eduardo Cuevas Montilla

 Facultad de Humanidades y Educación ULA

 

Categorías: